- Área: 5200 m²
- Año: 2006
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Fotografías:César San Millán
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio Se sitúa en un pequeño e inundable valle de acceso al mar en la localidad costera de Bakio. Ocupa el lado Noroeste de la parcela, liberando dos zonas, una al Oeste, por la que se realiza el acceso y se establece la relación del edificio con el público, y la otra, al Sur, algo elevado con respeto a la entrada y al campo de fútbol colindante, que se utilizará como solarium de las piscinas.
Desde el primer análisis del solar, el objetivo a perseguir fue adecuar el tratamiento de la escala del edificio a la arquitectura popular y de nueva residencia de baja densidad de su entorno, por lo que se planteó un juego volumétrico de tres elementos aprovechando el desnivel natural del terreno.
Los cierres de las fachadas se decidieron bajo la premisa de la adecuación al escaso presupuesto y de la fuerza expresiva de los mismos, considerando al edificio más como un objeto abstracto parte de un paisaje que como realidad figurativa que se representa a sí misma.
El policarbonato celular translúcido, en las zonas perimetrales públicas, resuelve el aislamiento térmico y junto con los abedules, la protección del sol del Oeste. Durante la noche se convierte en un faro que remata el valle.
Para el volumen superior se utiliza un sistema tipo cubierta deck con un aislamiento de baja densidad y 10 cms de espesor que, anclado mecánicamente a la chapa, ofrece un aspecto de sofá “chester” durante el día y de cielo estrellado durante la noche gracias a la luz tamizada por las claraboyas.
Las circulaciones, fundamentales en la eficacia funcional del edificio, se convierten en el hilo argumental en términos espaciales y expresivos del mismo. Aligeran la percepción de un edificio de partida voluminoso, y reducen su impacto con su planteamiento volumétrico y el tratamiento de la luz y los materiales que la filtran tanto durante el día como durante la noche.