
A partir de la pandemia surgida en 2019, muchas organizaciones han optado por una nueva metodología de trabajo que se desarrolle de manera remota, destinada a la protección contra el contagio del mayor número de sus colaboradores. El teletrabajo o “Home Office” ha mostrado un alto porcentaje de eficacia, pues se estima que la productividad de los empleados ha subido hasta en un 45%, razón por la cual se ha concluido que a nivel mundial casi el 64% de las empresas percibe muy viable el que gran parte de sus empleados sigan trabajado de manera remota, y otro 30% tiene pensado el implementar este sistema de trabajo a corto plazo.