Históricamente, la noción de infancia tal como la entendemos hoy no existía y, hasta la Edad Media, los niños eran vistos como adultos en miniatura. Según el historiador Philippe Ariès, recién a partir del siglo XVII la infancia comenzó a entenderse como una etapa diferenciada del desarrollo, que requiere cuidados, educación y protección específicos. Sin embargo, este reconocimiento progresivo no siempre se ha reflejado de forma coherente en el diseño y la organización del espacio urbano.
A medida que la Expo Osaka 2025 supera la mitad de su duración de seis meses, la exposición internacional continúa sirviendo como una plataforma global para la experimentación arquitectónica, el intercambio cultural y la innovación tecnológica. Inaugurada oficialmente el 13 de abril en la isla recuperada de Yumeshima, el evento está organizado bajo el tema "Diseñando la sociedad futura para nuestras vidas", y ya ha dado la bienvenida a más de 13 millones de visitantes hasta finales de julio. Concebida como un espacio para la colaboración entre disciplinas y fronteras, la Expo reúne más de 150 pabellones nacionales, temáticos y corporativos.
Sierra Blanca Estates, una firma de desarrollo inmobiliario, ha anunciado oficialmente planes para construir un nuevo barrio residencial en la ciudad costera de Málaga, España. Según los desarrolladores, la propuesta tiene como objetivo abordar la creciente demanda de vivienda en la capital de la comunidad autónoma de Andalucía, ubicada a lo largo del mar Mediterráneo en la península ibérica del sur. El nuevo barrio está planeado para el área de El Bulto e incluiría un edificio de 21 pisos diseñado por Zaha Hadid Architects.
La Catedral Cristo Rei es el diseño de Oscar Niemeyer para la catedral de Belo Horizonte, la capital del estado de Minas Gerais en el sureste de Brasil. Concebida entre 2005 y 2006, es uno de los últimos proyectos del fallecido arquitecto en el país. El diseño presenta una estructura con cúpula de aproximadamente 60 metros de diámetro, suspendida por dos elementos imponentes que se elevan a 100 metros de altura. Niemeyer se refirió al proyecto como una "plaza," que consiste en una catedral con capacidad para 3,000 personas y un altar externo diseñado para albergar hasta 20,000 fieles durante misas y eventos públicos. La construcción comenzó en 2013 y aún continúa. A principios de este año, el fotógrafo Paul Clemence visitó el sitio, documentando el proceso de edificación y capturando la aparición de las curvas características de Niemeyer.
El campo — históricamente subestimado — ha emergido como un territorio fértil de posibilidades. Más que un "espacio marginado", el rural latinoamericano se afirma hoy como un verdadero laboratorio de experimentación arquitectónica, social y ecológica. Desde comunidades agroecológicas hasta tecnologías de bajo impacto, de las relaciones entre humanos, máquinas y otros seres vivos a las soluciones locales para desafíos globales como la crisis climática, la seguridad alimentaria y la migración — el campo está rediseñando, con autonomía e inventiva, su propio futuro.
En 1982, en una conferencia sobre construcción de tierra en Tucson, Arizona, una presentación inusual desafió todo lo que los arquitectos/as pensaban saber sobre los recursos rurales. En lugar de centrarse en técnicas de construcción, el presentador, el arquitecto Pliny Fisk III, desplegó una serie de mapas dibujados a mano que revelaron algo extraordinario: Texas rural no era escaso en recursos, como sugiere la sabiduría convencional, sino rico en materiales más allá de la imaginación. Los mapas mostraban ceniza volcánica perfecta para concreto ligero, depósitos de caliche que se extendían a través de vastos territorios y bosques de mezquite que podrían suministrar tanto pisos de madera dura como aislamiento. La revelación redefinió las nociones predominantes de valor en la arquitectura.
Ante una crisis climática planetaria interconectada, la pérdida de biodiversidad y el agotamiento de recursos, el diseño regenerativo surge como un camino hacia la construcción de futuros rurales resilientes y ecológicamente sintonizados. En la intersección de arquitectura, agricultura y ecosistemas locales, están surgiendo nuevos modelos de prácticas agrícolas resilientes y autosuficientes. Estos proyectos no son grandes sistemas industriales, sino intervenciones arquitectónicas de pequeña escala, precisas y profundamente contextuales que crean espacios que fomentan el cultivo sostenible mientras respetan los ritmos ambientales, materiales locales y el conocimiento comunitario.
Titulado "Chinampa Veneta", la exposición mexicana para la 19ª Exposición Internacional de Arquitectura – La Biennale di Venezia busca promover la reflexión sobre cómo habitamos, cultivamos y diseñamos el mundo que compartimos. Ante la crisis ecológica global, el proyecto llama la atención sobre las chinampas, un antiguo sistema agrícola mesoamericano con más de cuatro mil años de historia. Este conocimiento ancestral, que entrelaza paisaje, infraestructura y técnica, se reimagina en el contexto de la Biennale, activando un ambiente vivo dentro de la ciudad de Venecia. El Pabellón Mexicano consta de dos "representaciones", una ubicada en el Arsenale y la otra construida sobre agua.
Desde el diseño de interiores de establecimientos para la práctica deportiva hasta espacios de bienestar, la arquitectura contemporánea continúa experimentando con la incorporación de diferentes usos, instalaciones y materialidades que permitan expandirse a públicos amplios, generar nuevas espacialidades y potenciar el desarrollo de diferentes actividades en simultáneo. Si bien cada deporte demanda su propio tipo de arquitectura como por ejemplo el entrenamiento de escalada, desde Australia hasta Países Bajos, profesionales de la arquitectura y el diseño apuestan por crear atmósferas donde el ejercicio se vuelva más que una experiencia física sino también psicológica, conectando la mente y el cuerpo con un estado de renovación física, distención y sociabilidad.
La arquitectura no se improvisa. Pensar mucho no es lo mismo que pensar bien. Porque una idea brillante, sin claridad y propósito, se queda en nada. Proyectar sin convicción da como resultado más de lo mismo: formas huecas, sin discurso ni alma. La Maestría en Diseño Arquitectónico (MDA) de la Universidad Panamericana no es un simple posgrado: es una invitación a regresar al origen del oficio. Aquí, el espacio se piensa como acto crítico, sensible y vital. No vienes a impresionar: vienes a proyectar lo que de verdad importa. Cada decisión proyectual habla de ti, y aquí aprenderás a sostenerla y transformarla en arquitectura con propósito.
La manera en que percibimos un espacio no depende únicamente de su escala o de su forma, sino de una serie de decisiones que, desde el interior, moldean nuestra experiencia. Algunos gestos son determinantes: la altura libre, la organización de los planos verticales o el tamaño de la cama. Otros actúan con mayor sutileza, como la incidencia de la luz, la tonalidad de los materiales o el uso del color. Todas estas variables influyen en la forma en que se manifiesta el espacio—si lo sentimos abierto o contenido, seccionado o continuo. En esa misma línea, el uso de pisos en grandes formatos se vuelve una operación clave: reduce la fragmentación visual y refuerza la continuidad de las superficies.
https://www.archdaily.mx/mx/1032420/espacios-sin-juntas-como-los-grandes-formatos-transforman-el-lenguaje-arquitectonicoEnrique Tovar
Contar una obra de arquitectura es siempre un desafío. Las imágenes de un proyecto, por más acertadas o espectaculares que sean, muchas veces dejan fuera de la vista todo el proceso que las hizo posibles. El registro de esos procesos —la "cocina" arquitectónica— es, sin duda, una parte fundamental de cualquier obra. Y lo es aún más cuando tanto el proyecto como su metodología de ejecución se alejan de las formas convencionales. Este es el caso de la obra construida por Susana, encargada de una finca sin experiencia previa en construcción, que asumió el encargo y lo llevó a cabo por su cuenta, guiada únicamente por las instrucciones que el arquitecto del proyecto, Manuel Ocaña, le enviaba por WhatsApp.
Immersive Resilience Garden / Changyeob Lee + Studio ReBuild. Imagen Cortesía de Studio ReBuild
El cañón de hormigón de la calle Degraves en Melbourne fue una vez un austero corredor de servicio en la obscuridad funcional. Hoy, el estrecho pasaje palpita con vida más allá de su famoso café. Las gramíneas nativas caen en cascada de jardineras cuidadosamente ubicadas, mientras que pequeños arbustos crean microclimas frescos. Desafiando los modelos tradicionales de diseño ecológico, enfoques comunitarios sobre la biodiversidad invitan a repensar cómo arquitectos, planificadores y comunidades colaboran para desarrollar futuros urbanos biodiversos.
A medida que la incertidumbre climática y los cambios en los ecosistemas redefinen las prioridades del diseño, la arquitectura asume un papel cada vez más activo en estos debates, en lugar de limitarse a observar. Desde esta perspectiva, la idea de hacer un "re" fomenta un paso atrás consciente para repensar, reconectar y realinear la relación entre los edificios y su entorno. Este enfoque, fundamental para la arquitectura regenerativa, se extiende más allá de tecnologías o escalas específicas, abarcando desde planes maestros que buscan renaturalizar las ciudades hasta pabellones nacionales que combinan arte y ciencia.
¿Cuál es el camino a seguir? Por un lado, muchos debates actuales hacen hincapié en la tecnología; por otro, hay enfoques que, más que oponerse, se complementan entre sí y amplían el abanico de posibilidades, basándose en la tradición, los conocimientos ancestrales y un profundo conocimiento del entorno. Entre estas perspectivas, la obra de Rudolf Steiner y el movimiento antroposófico, desarrollado a principios del siglo XX, ofrece una visión e ideas que conectan la arquitectura con los ritmos ecológicos, los materiales y la vida comunitaria.
El medio rural siempre ha ejercido un papel fundamental en el desarrollo social y económico de los países. Hasta el siglo XVIII, era el principal espacio de producción y organización de la vida. Con la Revolución Industrial, sin embargo, ocurrieron profundas transformaciones estructurales que redefinieron esta dinámica. La industria pasó a ocupar una posición central, vinculándose al medio urbano y dando origen a una visión dicotómica y jerarquizada entre rural y urbano, agricultura e industria. En este contexto, dos visiones opuestas ganaron destaque: una preveía la desaparición de lo rural ante la urbanización y el avance económico; la otra apostaba por su permanencia y renacimiento. Hoy sabemos claramente cuál de las hipótesis se ha vuelto verdadera.
Desde su inauguración en abril, la Expo de Osaka ha recibido a millones de visitantes de todo el mundo, constituyendo una verdadera muestra de innovación, arquitectura y diseño. Entre sus hitos destaca el Gran Anillo, obra del arquitecto japonés Sou Fujimoto, considerada la estructura arquitectónica de madera más grande del mundo. Bajo el lema de la Expo 2025 —Designing Future Society for Our Lives—, más de 150 países, a través de sus pabellones, han abordado temas clave para la arquitectura contemporánea, como la circularidad en la construcción, la memoria cultural, y la innovación y tecnología orientadas al futuro del entorno construido y sostenible.
El teórico André Corboz, conocido por sus aportes a la lectura crítica del territorio, propone que las ciudades deben entenderse como un palimpsesto. Es decir, una superficie reescrita continuamente, donde las huellas de capas anteriores permanecen visibles incluso después de sucesivas intervenciones. Para él, la ciudad no es una entidad estática, sino un organismo en constante transformación, donde se superponen capas históricas, funcionales y simbólicas. Por ello, trabajar en proyectos de restauración o rehabilitación de edificios históricos es especialmente complejo, y exige una reflexión cuidadosa sobre el enfoque a adoptar: ¿deben las ampliaciones y renovaciones buscar una coherencia total con el lenguaje original, o afirmarse como expresiones arquitectónicas de su propio tiempo?