
Varios eventos han moldeado a Marruecos desde su independencia. Uno de ellos es la transición de los arquitectos de servir al declinante imperio francés a servir a la recién independiente nación marroquí. Tras obtener la independencia en 1956, jóvenes arquitectos marroquíes y extranjeros tuvieron la tarea de construir un Marruecos autosuficiente. La demanda de infraestructura moderna, nuevos edificios administrativos y mejores instalaciones educativas y de salud llevó a un auge de la construcción. Este auge brindó a los arquitectos y urbanistas la oportunidad de expresar su visión.