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Arquitectos: FB+ estudio, Jimenez Arquitectos
- Área: 25 m²
- Año: 2020
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Proveedores: AutoDesk, Taquil

Descripción enviada por el equipo del proyecto. El encargo consiste en construir una nueva capilla en el cementerio de Taquil, donde se celebrará una misa anual en honor a los difuntos. El proyecto será gestionado por el párroco, los síndicos y la población.

Tenemos el reto principal de buscar una solución arquitectónica con el menor recurso constructivo y económico posible que encontremos en el sector.


Taquil, una parroquia rural de la ciudad de Loja en Ecuador, que se caracteriza por sus prácticas rurales, donde la comunidad aún conserva el arraigo de la religión católica, por lo que esta capilla será un punto importante en el territorio y la vida de las personas. Dichas actividades en su mayor parte se desarrollan en la intemperie, por lo que las misas campales son realizadas con regularidad. Es así, que la respuesta arquitectónica busca potenciar estos modos de vivir; para dicho fin se desarrollará una capilla abierta implantada en la cumbre de la montaña del cementerio.

La minga como medio de autoconstrucción es el recurso principal, ya que todos los vecinos de la parroquia (principales beneficiarios del cementerio) acuden diariamente a construir su capilla.

Sabiendo que el limitado recurso económico es una importante variable a resolver, la mirada se enfoca a la manera de construcción local, donde se establece la piedra, tierra, madera y teja como los materiales iniciales.


La migración campo-ciudad ha provocado que muchas de las casas del sector se abandonen, donde la teja ha prevalecido en el tiempo con la capacidad de reciclaje, por lo que es elegida como el material principal de construcción, por su reciclabilidad, resistencia a la intemperie y capacidad de repetición.

El sistema constructivo se basa en la colocación de teja sobre teja para armar la estructura, donde el primer tercio es teja continua y los dos tercios restantes se arman tubos canalizadores del viento. Además, los muros de teja armada se curvan siguiendo la "curva Tractriz" para contribuir a disipar el viento y armar un canal que conduce a subrayar el paisaje. La obra remata con una abertura al cielo que deja ingresar la luz cenital.


Todo esto intensificado por la intervención del arte; la escultura del "Espíritu Santo" cuelga en la parte superior de fachada; los mosaicos con material reciclado, que recubren el altar, piso y parte de la mampostería de teja, y la colocación de piedras (entre sus juntas), una a una, por parte de la comunidad.

Finalmente, esta obra se ha convertido en un hito para la comunidad donde celebran la misa una vez al año y también valorada por el sector turístico donde existe afluencia de visitantes de diversas procedencias que activan las microeconomías locales.
