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Arquitectos: BRICKLAB
- Área: 5000 m²
- Año: 2024
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Fotografías:Sultan Bin Mutarrid, Baya Studios
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Durante décadas, las actuaciones musicales y otros encuentros públicos no religiosos fueron estrictamente controlados por el gobierno saudí. Esto prácticamente confinó la mayoría de las formas de expresión cultural pública, especialmente la música, a la privacidad de los hogares y comunidades cerradas. Para 2016, el país fue testigo de transformaciones sociales, culturales y económicas a gran escala para alejarse del extremismo religioso, mejorar la calidad de vida y atraer inversión extranjera. En 2019, un pequeño grupo de emprendedores estableció Middle Beast (conocido comúnmente por el acrónimo MDL Beast) para lanzar una serie de festivales de música a gran escala en todo el país. Este momento histórico representó un cambio dramático en las actitudes comunes hacia las reuniones públicas. Más importante aún, se considera que fue la primera vez que la cultura underground oculta de la música electrónica fue accesible al público.
En 2023, tras el éxito de sus eventos recurrentes, MDL Beast se acercó a Bricklab para diseñar uno de sus primeros espacios permanentes. Ubicada en el Barrio Diplomático de la capital saudí, su propiedad de 18.000 m2 fue una vez una de las instalaciones ecuestres más prominentes de Riad. El extenso recinto incluye un gran establo para caballos, un bloque administrativo y un puñado de pequeñas instalaciones de servicio repartidas por una vasta extensión de delicados paisajes desérticos. Construido en la década de 1990, el lenguaje arquitectónico en todo el sitio claramente tomó influencias de la amplia región central de Najd, con ventanas trianguladas, parapetos escalonados y el uso de piedra local de Riad. Sin embargo, todos los edificios están decorados con una inusual combinación de colores vivos, como rosas y amarillos, similar a la obra del arquitecto mexicano Luis Barragán.
El alcance del proyecto incluye tres intervenciones principales con programas específicos a través del extenso paisaje desértico que compone el sitio. Situado en una meseta elevada, el edificio administrativo de 500 m2 fue rehabilitado y ampliado para albergar un restaurante/lounge de alta cocina. En el otro extremo del sitio, el deteriorado edificio del establo de 1.000 m2 fue reforzado estructuralmente para convertirse en un lugar de música de clase mundial. Se añadió una estructura independiente adicional de 250 m2 al conjunto para miembros e invitados VIP. Con las distintivas pátinas de los edificios existentes en mente, se asignó una paleta de contrastes basada en el modelo RGB a cada estructura. Estructuras de acero de colores brillantes se yuxtaponen a los edificios existentes para expandir sus espacios interiores, acomodar nuevos programas y crear áreas exteriores sombreadas.
Estos complementos están compuestos por componentes tubulares de acero con cualidades tectónicas expresivas que celebran los procesos de soldadura y montaje. Las brillantes intervenciones RGB contrastan fuertemente con la estrategia paisajística desarrollada por el estudio Libani, con sede en Beirut, Dubái y Londres, que se inspira en las sutiles cualidades del ecosistema local de Wadi Hanifa, característico de las condiciones actuales del lugar. Concebido como un concepto de rancho seco, un conjunto cuidadosamente seleccionado de exuberantes islas paisajísticas se encuentra disperso por el paisaje predominantemente árido de piedra, arena y guijarros.
Los espacios interiores del proyecto se conciben como continuidades del lenguaje arquitectónico en términos de paleta de colores y materiales contrastantes. Si bien se preservan elementos del pasado ecuestre del edificio, se establece una sucesión narrativa de cualidades ambientales. Los visitantes son atraídos a deambular entre salones, habitaciones y corredores para experimentar un conjunto de atmósferas propicias para diferentes tipos de interacción social. El enfoque arquitectónico del proyecto es una meditación sobre la preservación y la renovación. Es un llamamiento abierto a reevaluar el papel de la arquitectura como guardiana del progreso en un periodo de rápida construcción de nuevos edificios y demolición inminente. Al celebrar la poética de la memoria y adoptar un enfoque consciente hacia la obtención de recursos materiales, este proyecto intenta demostrar las ventajas de la rehabilitación y la reutilización adaptativa en el desarrollo de nuestro paisaje urbano colectivo.
