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Arquitectos: Grupo Eisen
- Área: 250 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Gonzalo Viramonte
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En el piedemonte de las Sierras Chicas en la periferia de Córdoba, sobre la ladera Este con vistas hacia la ciudad y la llanura verde que la precede, Grupo Eisen desarrolló el proyecto de la casa PMV. Cuando el emplazamiento es tan propicio para apoderarse de las visuales, la arquitectura puede descansar en la búsqueda de ese objetivo, y en este caso en particular ese fue el requerimiento primordial de los comitentes, a lo que sumaron la exigencia de que la planta se resolviera en un solo nivel como si fuera un departamento, pero con un área verde y piscina. Esto desde un comienzo eliminó la posibilidad de emplear el clásico esquema de aterrazado con taludes para lotes con pendiente como en este caso.
El desafío se afrontó generando una plataforma apoyada sobre suelo natural nivelado en parte y el resto, completando el mismo plano con una estructura de hormigón armado suspendida por medio de pantallas, despegándose del terreno, y permitiendo que la vegetación autóctona se preserve por debajo. Surgió así una volumetría serena posada sobre la ladera de mediana pendiente, generando una bandeja de un solo nivel desde la mitad del terreno. Dos áreas bien definidas conforman el partido. Una cubierta que aloja todos los ambientes habitables y una descubierta con terraza jardín y la piscina orientada hacia el amanecer y la ciudad.
Desde un planteo simple con sucesión de locales todos con vista y salida a una galería longitudinal que los protege, la planta se convierte en un contenedor de actividades signadas por la versatilidad, potenciando el uso de cada espacio contenido en una envolvente neutra de hormigón a la vista, madera y acero. Solo se destaca el equipamiento subordinado a cada actividad específica, siempre privilegiando las visuales. Las áreas húmedas, (sanitarios y lavadero), abren a patios interiores para generar un microclima donde la visual fuera próxima y exclusiva; negada al exterior para garantizar intimidad.
El estar - comedor ha sido integrado a la cocina y todos dan a la galería de modo que no fue necesario pensar en un quincho asador pues se integran perfectamente por medio de aberturas de aluminio que abren de pared a pared y de piso a techo, evitando duplicidad de áreas. El dormitorio principal en suite y otros dos con usos mixtos, uno escritorio y el otro atelier, comparten proximidad sin perder privacidad. La galería que antecede la terraza jardín y la piscina con borde infinito convierten el espacio exterior en un balcón hacia el horizonte urbano. La vida en PMV transcurre en una racional sucesión de ambientes de uso ameno y dinámico signada por las visuales.
