
En la mañana del pasado 3 de noviembre en Nueva York, la primera mudanza al One World Trade Center marcó la apertura oficial del (podría decirse) edificio más alto del hemisferio occidental, a 13 años de la tragedia del 9/11. Tal como describió New York Times, "el extraordinario momento aconteció de la manera más común posible", con los empleados de la editorial internacional Condé Nast entrando al lobby de mármol blanco (proveniente de la misma cantera de donde vino el mármol de las Torres Gemelas) y dirigiéndose directamente a los ascensores para comenzar sus jornadas de trabajo.
Para celebrar su finalización, los renombrados fotógrafos de arquitectura Iwan Baan y James Ewing se elevaron para capturar el One World Trade Center en todo su esplendor.
Las imágenes, después del salto.







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