Celebrada en Pamplona del 23 al 26 de septiembre, la Bienal de Arquitectura Latinoamericana 2025 reunió a estudios emergentes y voces consolidadas del continente. La edición destacó por la calidad y diversidad de las prácticas seleccionadas: proyectos de gran riqueza formal y conceptual, desarrollados por estudios jóvenes pero de una solidez admirable, que reflejan la madurez y vitalidad del panorama arquitectónico latinoamericano actual.
Ante una crisis climática planetaria interconectada, la pérdida de biodiversidad y el agotamiento de recursos, el diseño regenerativo surge como un camino hacia la construcción de futuros rurales resilientes y ecológicamente sintonizados. En la intersección de arquitectura, agricultura y ecosistemas locales, están surgiendo nuevos modelos de prácticas agrícolas resilientes y autosuficientes. Estos proyectos no son grandes sistemas industriales, sino intervenciones arquitectónicas de pequeña escala, precisas y profundamente contextuales que crean espacios que fomentan el cultivo sostenible mientras respetan los ritmos ambientales, materiales locales y el conocimiento comunitario.
Buscando crear un diálogo fluido entre la arquitectura y su paisaje circundante, el estudio de la topografía encarna el reconocimiento y la investigación sobre la aplicación de materiales, estrategias autosuficientes, resoluciones de bajo mantenimiento y diseños paisajísticos que se integren al entorno natural y minimicen el impacto ambiental de los proyectos. Más allá de registrar las diferencias de niveles, orientaciones solares, vientos predominantes o pendientes de escurrimiento de los terrenos, varios profesionales de la arquitectura en Argentina demuestran un interés por desarrollar soluciones arquitectónicas capaces de adaptarse a las geografías naturales y restaurar el vínculo entre la naturaleza y el ser humano.
¿Qué estructuras e infraestructuras mantienen los vínculos y relaciones entre el campo y la ciudad? ¿Cómo la arquitectura y las tecnologías emergentes mantendrán o no esta coexistencia de ambos mundos en el futuro? La reducción de la huella ecológica, el impacto del cambio climático, la descentralización de las grandes ciudades, la seguridad alimentaria y demás problemáticas contemporáneas interpelan a profesionales de la arquitectura y el urbanismo a nivel global bajo el principal objetivo común que se centra en mejorar la calidad de vida de la ciudadanía y alcanzar el bienestar físico, mental y emocional en el entorno construido y natural.
La 19ª edición de la Bienal de Arquitectura de Venecia abrió oficialmente sus puertas al público el pasado 10 de mayo, convirtiéndose en un gran escenario internacional para conocer la actualidad de la arquitectura mundial y abrir conversaciones en torno a los desafíos que enfrenta hoy la disciplina, tanto los compartidos como los específicos de cada territorio. Bajo el lema de este año, "Intelligens. Natural. Artificial. Collective", la propuesta del curador general, el arquitecto italiano Carlo Ratti, invita a reflexionar sobre la interconexión de la arquitectura con otras disciplinas, como el arte, la inteligencia artificial y la tecnología, haciendo hincapié también en los territorios, los paisajes y, sobre todo, en las personas que habitamos y conformamos de manera colectiva nuestro entorno construido.
La propuesta de los arquitectos argentinos Marco Zampieron y Juan Manuel Pachué para el Pabellón Argentino de la 19ª Bienal de Arquitectura de Venecia 2025, es clara desde el inicio: al ingresar a Siestario, el visitante se sumerge en un espacio de luz tenue y sonidos evocadores, encontrándose —en el centro, extendida por la sala y como protagonista indiscutida— con una gran bolsa rosada inflada que invita automáticamente a recostarse sobre ella. Se trata de una silo bolsa, un elemento utilizado en el campo argentino para almacenar granos y símbolo de la economía de exportación nacional. En este contexto, la silo bolsa no es solo un gesto espacial, sino también temporal: una invitación a pausar y reflexionar en medio del recorrido de la Bienal.
A través de sus proyectos no construidos, obras e investigaciones, el pensamiento de Amancio Williams se da a conocer como producto de un profundo conocimiento de las tendencias más avanzadas de su época desde el cual busca reflexionar sobre el proyecto arquitectónico, el urbanismo, el planeamiento y el diseño. Abordando diversas temáticas, conceptos y hasta materiales, se propone construir un universo propio sobre un presente que al mismo tiempo resulta futuro, internacional y argentino. Su propuesta de “La ciudad que necesita la humanidad” reúne edificios lineales y estratificados a 30 metros del suelo contemplando desde oficinas hasta rutas y trenes magnéticos en distintos niveles de un mismo edificio. El archivo Amancio Williams del Centro Canadiense de Arquitectura de Montreal documenta la trayectoria de Williams como arquitecto y diseñador desde la década de 1940 hasta finales de la década de 1980. El fondo registra su trabajo en más de 80 proyectos de arquitectura, urbanismo y diseño, así como la administración de su estudio de arquitectura y sus actividades profesionales. El archivo, que incluye dibujos y bocetos, maquetas de presentación, material fotográfico (como fotografías de maquetas, proyectos terminados, imágenes de referencia, reproducciones fotográficas de planos y fotografías de obra), está disponible para consulta ofreciendo más detalles.
El desierto es un territorio en constante transformación. Moldeado por el soplo de los vientos, sus relieves, ondulaciones y fisuras aparecen y desaparecen en la inmensidad árida, como si el paisaje fuera una pantalla en movimiento. Un lugar de contrastes profundos, donde el calor implacable del día se disuelve en la frescura de la noche, revelando la naturaleza en su esencia más primitiva. Ante esta geografía mutable e indomable, ¿cómo concebir una arquitectura que no solo se integre, sino que también respete y dialogue con un ambiente remoto y en continua metamorfosis? Este es el desafío que enfrentan los proyectos hoteleros ubicados en el paisaje desértico de América Latina.
En la producción arquitectónica argentina de los últimos años, han surgido numerosos estudios que, a través de su práctica, exploraciones y obras, han adquirido relevancia dentro de la disciplina contemporánea. Es importante destacar que muchos jóvenes arquitectos, aun con trayectorias incipientes en cuanto a obra construida, han logrado posicionarse, demostrando una voz propia y una impronta definida en su trabajo.
El Premio Mies Crown Hall de las Américas (MCHAP) ha anunciado los cinco proyectos finalistas para el Premio de las Américas 2025, destacando proyectos de Argentina, Canadá, México y Estados Unidos. El anuncio fue hecho por Dirk Denison, director del MCHAP, y Maurice Cox, presidente del Jurado de este año. Este premio bienal, establecido en 2013 por el Colegio de Arquitectura del Instituto de Tecnología de Illinois, reconoce logros arquitectónicos excepcionales en América del Norte, Central y del Sur. Considerando proyectos completados entre junio de 2022 y diciembre de 2023, su objetivo es destacar aquellos proyectos que contribuyen significativamente a sus comunidades y elevan los estándares profesionales.