La arquitectura tiene el poder de comprometerse emocionalmente con sus ocupantes. Los momentos creados desde la arquitectura táctil se extienden al diseño de la experiencia — una necesidad creciente en la economía de la experiencia. A través de la estimulación sensorial e intelectual, los espacios pueden conectarse profundamente con sus ocupantes, lo que resulta en momentos memorables. Organizar una experiencia requiere no solo una comprensión de los principios espaciales, sino también cómo se diseñan los servicios espaciales.
Adjaye Associates, en colaboración con Holst Architecture, el principal arquitecto registrado, ha presentado las primeras representaciones de la nueva Biblioteca del Este del Condado en Portland, Oregón, una instalación que proporcionará una amplia gama de servicios y programación. El diseño del edificio de 95,000 pies cuadrados se basa en una amplia participación y retroalimentación de la comunidad. Varias organizaciones locales ayudan en estos esfuerzos mediante la organización de eventos comunitarios públicos, grupos de enfoque, divulgación para adolescentes y encuestas. Dado que el proyecto se encuentra actualmente en la fase de diseño esquemático, las imágenes presentadas son borradores iniciales, que probablemente cambien para reflejar los aportes recibidos.
La plataforma SPACE10 con sede en Copenhague, Dinamarca le da un giro a sus oficinas para rediseñar su planta baja y brindar un espacio en donde convive una biblioteca, una galería y una nueva agenda de eventos que busca activar este espacio para integrar a la comunidad.
Se podría decir que la calidad del aire de los ambientes interiores nunca ha recibido la debida atención a lo largo de la historia. Si bien la contaminación atmosférica ha sido una amenaza desde la época de Hipócrates, en el año 400 a.C. –luego convirtiéndose en una verdadera preocupación en el tiempo de la Revolución Industrial–, no se habla mucho de cómo esto afecta las condiciones de bienestar en los espacios que habitamos. Actualmente, es un tema que va ganando más relevancia y preocupación, ya que la humanidad pasa alrededor del 90% de su tiempo en interiores y la calidad de estos espacios interfiere directamente en el bienestar y la salud a largo plazo. De hecho, la Calidad Ambiental Interior (IEQ, Indoor Environmental Quality en inglés) abarca mucho más que la contaminación interior. Se refiere a un equilibrio entre la calidad del aire, la acústica, la iluminación, la temperatura y otros factores que contribuyen a un ambiente agradable y, sobre todo, saludable para sus ocupantes. La empresa Armstrong, bajo el lema "todo espacio puede ser un espacio saludable", ha desarrollado soluciones para contribuir a la mejora de aquellos espacios donde pasamos más tiempo, como edificios educativos, sanitarios, oficinas y viviendas.
"Vida, espacio, edificios - en ese orden". Esta frase, del arquitecto urbanista danés Jan Gehl, resume los cambios que ha sufrido Copenhague en los últimos 50 años. Conocida actualmente como una de las ciudades con los niveles más altos de satisfacción con respecto a la calidad de vida, la forma en que se diseñaron sus espacios públicos y edificios ha inspirado a arquitectos, autoridades gubernamentales y urbanistas de todo el mundo. Lo que vemos hoy, sin embargo, es el resultado de una valiente toma de decisiones, mucha observación y, sobre todo, diseños que ponen a las personas en primer lugar. Copenhague será la Capital Mundial de la Arquitectura de la UNESCO-UIA en 2023, así como la sede del Congreso Mundial de Arquitectos de la UIA debido a su fuerte legado en arquitectura innovadora y desarrollo urbano, junto con sus esfuerzos concertados en cuestiones de clima, soluciones de sostenibilidad y habitabilidad.
Vicuña Mackenna 20 (VM20), a metros de la estación Metro Baquedano y pleno corazón de Santiago, es un nuevo proyecto de la Universidad de Chile que busca tanto convertirse en un polo de extensión artística y cultural como impactar en el plan de recuperación de espacios públicos del entorno central de la capital.
Entrados ya en el 2023 y empezando el Año del Conejo, compartimos con ustedes algunas reflexiones sobre lo que nos trajo el año anterior, y como nos preparamos para una nueva temporada.
Durante el año pasado expandimos nuestra red como parte de DAAily platforms, ajustamos nuestra marca, y con el futuro del entorno construido como nuestra misión nos volvimos más consientes sobre como traer esto a nuestra cobertura diaria, considerando como los desafíos a los que nos enfrentamos convergen en este. Desde las crisis de vivienda y de energía, a la inequidad, migraciones y guerra, todo converge en el entorno construido, y no podemos abstraernos de esto.
Mientras la arquitectura se vuelve una preocupación transversal y más gente no solo se interesa, sino que quiere participar en ella de manera activa, tomamos la responsabilidad de abrir esta caja negra y de construir puentes de conocimiento respondiendo la desafiante pregunta de Qué es una buena arquitectura, en nuestro primer libro "The ArchDaily Guide to Good Architecture" publicado junto a gestalten.
La verdadera belleza de la arquitectura radica en su capacidad para servir y mejorar la experiencia humana, aunque este principio fundamental no siempre se respeta. Con demasiada frecuencia, vemos edificios "públicos" que no se integran en el tejido urbano, están desconectados de su entorno y no contribuyen a la vitalidad y calidad de vida de una ciudad. Algunos pueden ser bastante hermosos a la vista, pero si no son funcionales, cómodos y acogedores para las personas a las que deben beneficiar, su valor como espacios públicos se vuelve bastante cuestionable. Íconos arquitectónicos como la Ópera de Sydney y el Museo Guggenheim de Bilbao, por ejemplo, son celebrados no solo por sus impresionantes siluetas o impresionantes interiores, sino porque mejoran la cultura y la vida de la ciudad, enriquecen a la comunidad y ofrecen diversas oportunidades para la interacción y la participación pública. Es este enfoque de diseño holístico y centrado en el ser humano lo que permite que estos hitos se conviertan en partes integrales de la identidad de una ciudad, una que sus ciudadanos acogen y apropian.