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Arquitectos: Pezo von Ellrichshausen
- Área: 300 m²
- Año: 2025

Arquine convoca, desde 1998, un concurso de arquitectura que permite comparar ideas y propuestas en igualdad de condiciones. Como en las últimas ediciones, para el Concurso Arquine No.28 se invita a diseñar, construir y activar un pabellón en el Centro Histórico de la Ciudad de México en el marco del Festival de Arquitectura y Ciudad MEXTRÓPOLI. Los concursantes deberán proyectar una pieza que cumpla con las condiciones que especifican las bases de este concurso en términos de tiempos, costos y características, considerando la capacidad de provocar y atraer a la ciudadanía, lo cual será una parte fundamental para la evaluación de la propuesta.

Snøhetta ha revelado nuevas imágenes de su diseño ganador para la nueva Ópera de Düsseldorf. Lanzado por primera vez en 2017, el concurso "Opera House of the Future" experimentó varias interrupciones a lo largo de los años debido a cambios en el sitio de construcción planificado, extendiendo el proceso de toma de decisiones para este importante proyecto cultural. El nuevo edificio está diseñado para albergar la Deutsche Oper am Rhein junto con la Biblioteca de Música de la Ciudad de Düsseldorf y la Escuela de Música Clara Schumann, formando un espacio cultural consolidado. La propuesta busca establecer un teatro de ópera contemporáneo que fortalezca la infraestructura cultural y la vida pública de la ciudad.

El Congreso Mundial de Arquitectos de la UIA 2026 Barcelona (UIA2026BCN) lanza el International Emerging Workshop, un formato especial del Congreso diseñado para que estudiantes y jóvenes profesionales participen en un laboratorio dirigido por doce reconocidos estudios de arquitectura emergentes.





En un mundo que enfrenta agotamiento ecológico y saturación espacial, el acto de construir ha llegado a representar tanto creación como consumo. Durante décadas, el progreso arquitectónico se midió por lo nuevo: nuevos materiales, nuevas tecnologías, nuevos monumentos de ambición. Sin embargo, hoy en día, la disciplina está cada vez más moldeada por otra forma de inteligencia, una que valora lo que ya existe. Los arquitectos y arquitectas están aprendiendo que hacer menos puede significar diseñar más, y este cambio marca la aparición de lo que podría llamarse una arquitectura de contención: una práctica definida por el cuidado, el mantenimiento y la elección deliberada de no construir.
El principio reconoce que el edificio más sostenible es a menudo el que ya existe, y que la transformación puede ocurrir a través de la preservación, la reparación o incluso la ausencia. Elegir no construir se convierte en un acto político y creativo, una respuesta a los límites materiales del planeta y a los límites éticos del crecimiento infinito. Esa arquitectura va más allá de la producción de nuevas formas para abrazar la continuidad, extendiendo la vida de las estructuras, los materiales y los recuerdos que ya habitan el mundo.

