Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria

Poner la mesa es una reflexión ilustrada de las arquitectas Florencia Köncke y Paula Olea Fonti. En los siguientes párrafos, las autoras desarrollan una primera aproximación al estudio de la mesa como “el centro de nuestra noción de  domesticidad”(1). En la relación entre el espacio, los objetos y las personas y como catalizador social para la reunión y el intercambio.

En la casa medieval la mesa era desarmable y descansaba sobre caballetes. A partir de allí surgen los términos poner y levantar la mesa. La mesa estaba en constante uso y se realizaban sobre ella diferentes funciones a través del cambio de mobiliario según se necesitara. “No había mesa de comedor, solo una mesa que se utilizaba para preparar la comida, comer, contar el dinero y, de ser necesario, para dormir”(2).

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 2 de 7Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 3 de 7Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 4 de 7Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 5 de 7Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Más Imágenes+ 2

De un modo similar, en la actualidad, la domesticidad es generada a través de la apropiación del objeto —la mesa—, en el desarrollo de diversas actividades: comer, estudiar y trabajar, entre otras. La reclamamos en condiciones adversas y la inventamos o recordamos cuando esta no existe. La mesa como concepto nos permite poner a la mesa objeto en relación a la mesa del imaginario social; a un punto tal que la ausencia de mesa real a veces también puede ser leída como mesa.

El planteo, a partir de allí, intenta reivindicar a la mesa como objeto y como concepto, poniendo en valor su capacidad de ser un poco más que una mesa. Esta es vista normalmente como un objeto infraordinario(3). En su cotidianeidad nos ha dejado de sorprender, pero sin embargo sigue siendo una pieza imprescindible de uso diario. Este razonamiento interroga al objeto mesa, habitual y banal, para demostrar la posibilidad que tiene lo infraordinario de convertirse en extraordinario. Y lo hace del mismo modo en que actúan autores como Bruno Munari. En "Búsqueda de la comodidad en una silla incómoda"(4) manifiesta a través de la experimentación física y dinámica con un sofá, la unas reflexiones del uso diario del mismo objeto ordinario.

Las ilustraciones, concebidas específicamente para este fin, reconocen, en cinco circunstancias diferentes, a la mesa objeto en relación a la mesa concepto: proyectada, descontextualizada, confinada, como ritual y como soporte simbólico. Para esto, se apoya en la elección de una mesa ordinaria(5). Genérica, tanto por sus características físicas y materiales, como por la ausencia de significado emocional que genera; asequible por casi todos: la mesa de IKEA(6). Una mesa pensada para una casa tipo, donde vive una familia tipo, ¿para darle un uso tipo? Este texto es una invitación a repensar críticamente la idea de mesa ante: las ideas preconcebidas acerca de los espacios donde debería haber una mesa, las acciones que se realizan en ella y la frecuente necesidad de recrearla en su ausencia.

La mesa proyectada

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 7 de 7
La mesa proyectada. Image Cortesía de Florencia Köncke y Paula Olea Fonti

IKEA proyecta a través de su catálogo una domesticidad inventada, en la que muestra la esfera de la vida cotidiana en un espacio ideal. En este contexto, la mesa ordinaria es diseñada por la empresa como una pieza genérica, de dimensiones estándar, pero publicitariamente especial. El objeto es promocionado a través de una escenografía ejemplar montada en una tienda y busca transmitir la idea de que fue pensado para completar un espacio singular. En contraposición a ello, diversos proyectos de arquitectura son concebidos desde el objeto mesa y el espacio que genera. En estos casos, la mesa es diseñada como un artefacto peculiar, de dimensiones especiales e inseparable del espacio que la contiene.

La mesa del ritual

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 3 de 7
La mesa del ritual. Image Cortesía de Florencia Köncke y Paula Olea Fonti

La mesa está presente como elemento de unión en una infinidad de celebraciones populares. Las Navidades, Pascuas o cumpleaños son acontecimientos para los cuales esta se prepara con anticipación y entusiasmo. La mesa objeto se viste para el evento especial. Al reunirnos en familia o en sociedad afora la idea de la mesa como espacio de relación. En la cultura occidental, la domesticidad se da en torno a una mesa rodeada de sillas; en algunos lugares de Oriente, es una mesa baja la que reúne a las personas sentadas en el suelo. En casos más extremos, como en algunas celebraciones de la cultura musulmana, se generan sobre una alfombra específica. La misma es soporte tanto de la comida como de los comensales. Sea cual sea la superficie es el acto del comer el que reúne a las personas.

La mesa descontextualizada

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 4 de 7
La mesa descontextualizada. Image Cortesía de Florencia Köncke y Paula Olea Fonti

La domesticidad sale a la calle a través del objeto. Encuentra a la mesa fuera de su ámbito habitual. Se puede ver en la calle una serie innumerable de acciones que se realizan en el acto de comer: algunos comen de pie en mostradores provisorios, otros lo hacen sentados en bancos o escaleras, algunos en mesas ubicadas en las terrazas de los bares, otros salen con el mobiliario del interior de la casa a la acera. En todos los casos, la mesa viaja al exterior y se expone junto con sus habitantes ante la mirada de otros.

La mesa como soporte simbólico

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 5 de 7
La mesa como soporte simbólico. Image Cortesía de Florencia Köncke y Paula Olea Fonti

El soporte simbólico aparece en situaciones donde, en ausencia de la mesa objeto, la domesticidad es generada a través de una analogía a esta. Poner una manta en el pasto o buscar un tronco de madera donde sentarse en la naturaleza, son ejemplos de apropiación espacial. “Con la mesa —o solo con su representación—, se da sentido a un espacio, a un lugar”(7). La búsqueda radica en extender la actividad doméstica por excelencia, desde la casa a otro sitio, llevando los conceptos culturales que tenemos incorporados sobre dicho acto.

La mesa confinada

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 2 de 7
La mesa confinada. Image Cortesía de Florencia Köncke y Paula Olea Fonti

El confinamiento ha reivindicado el papel de la mesa en nuestras viviendas. “Una mesa alargada puede ser muchas cosas: un lugar donde comer dos personas, un estante donde apilar libros o la bandeja donde dejar las llaves y el correo: un puerto de llegada que nos confirma que estamos en casa. En otras ocasiones, se convierte en la superficie perfecta para un banquete”(8). La mesa objeto ha demostrado ser capaz de mutar a lo largo del día, como lo hacían las de la edad media, donde sobre una misma superficie se realizaban múltiples actividades diarias. La mesa del hogar contemporáneo retoma este lugar y reemplaza a las especializadas que solíamos utilizar anteriormente: del comedor, de la cocina, de la universidad o del bar. Alberga, en una misma, a todas las mesas.

Esta reflexión sobre la mesa explora la condición compleja de los distintos grados de domesticidad, a través de la relación corporal con los muebles y el espacio. Así como Georges Perec presenta al espacio interior como una serialización de objetos, movimientos y operaciones, entendemos que las actividades que se desarrollan en él lo condicionan y transforman, alterando sus características iniciales. La relación del cuerpo con el objeto, es resultado de un comportamiento social y cultural, que, en ocasiones, se desarrolla de manera singular.

Como afirma Stephen Bates, “la mesa (...) ha evolucionado en el tiempo: ha pasado de ser un artefacto meramente práctico que proporciona una superficie de trabajo y soporte para los utensilios domésticos, a ser un objeto que caracteriza el espacio, y que nos sirve para fortalecer los vínculos sociales y emocionales”(9). La mesa, desde el objeto y desde el concepto, potencia la compañía, ofrece un espacio para la socialización y es un catalizador en las reuniones familiares y en las actividades domésticas.

Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria - Imagen 6 de 7
Poner la mesa. Image Cortesía de Florencia Köncke y Paula Olea Fonti

Si bien los dibujos que acompañan este texto no son más que la representación gráfica de momentos banales e inútiles, es mediante ellos que conseguimos poner en valor el rol de la mesa en situaciones de la vida cotidiana. A través de la representación de lo infraordinario, se pretende recoger momentos triviales y hacerlos sustanciales. Los cinco puntos planteados construyen escenas diarias a partir de la mesa genérica donde el escenario cambia no solo por el fondo, sino por la superposición entre este, los personajes y la actividad que en ella se desarrollan. La mesa demuestra ser más que una mesa, permite otras funciones para las cuales no fue preconcebida. No se limita por espacio que la contiene. Es, en otras palabras, cuando lo ordinario se vuelve extraordinario.

Bibliografía

  • 1, 8, 9. BATES, Stephen. «Sobre la taula» Revista Quaderns d'arquitectura i urbanisme, 271, 2018.
  • 2. RYBCZYNSKI, Witold. La casa historia de una idea. Editorial NEREA, 2009.
  • 3. PEREC, Georges. Especies de espacios. Madrid. Editorial Intervención Cultural, 2001.
  • 4. MUNARI, Bruno. «Búsqueda de la comodidad en una silla incómoda» Revista Domus 202, 1944.
  • 5. WALKER, Enrique. Lo ordinario. Barcelona. Editorial Gustavo Gili, 2010. “Define lo ordinario como aquellos objetos que la disciplina de la arquitectura proclama fuera de su territorio y contra los que define sus límites. Lo ordinario, es lo cotidiano, lo hallado, lo popular, lo banal.”
  • 6. COLLINS, Lauren. A Reporter At Large, «House Perfect.Is e Ikea». Editorial New yorker. Nueva York, 2011. “IKEA es actualmente el mayor operador de venta de muebles y objetos del mundo «Abrió su primera tienda en Tokio, y con ella inició una expansión global que ha hecho que en 2012 su catálogo tuviese tiradas mayores a las de la Biblia y en un número mayor de idioma.”
  • 7. MONTEYS, Xavier. «La arquitectura de la comida». Revista Quaderns d'arquitectura i urbanisme, 271, 2018.
  • _JAQUE, Andrés. Entrevista «el hogar como arena política» Revista MONU Domestic Urbanism,2016
  • _PEREC, Georges.  Lo infraordinario. Madrid. Editorial Impedimenta,2008
  • _STEEGMANN, David. «Ciudad, casa, comida». Tesis doctoral departamento de proyectos arquitectónicos, ETSAB, UPC, 2017.

Galería de Imágenes

Ver todoMostrar menos
Sobre este autor/a
Cita: Florencia Köncke + Paula Olea Fonti. "Poner la mesa: De la mesa ordinaria a la mesa extraordinaria" 30 ene 2022. ArchDaily México. Accedido el . <https://www.archdaily.mx/mx/974474/poner-la-mesa-de-la-mesa-ordinaria-a-la-mesa-extraordinaria> ISSN 0719-8914

Has seguido tu primera cuenta!

¿Sabías?

¡Ahora recibirás actualizaciones de las cuentas a las que sigas! Sigue a tus autores, oficinas, usuarios favoritos y personaliza tu stream.