
Por Roland Krebs, urbanista austriaco con experiencia en planificación, diseño y desarrollo urbano. Máster en en Planeación Urbana en la Universidad de Tecnología de Viena (UTV). Trabaja como docente en la UTV y consultor en las operaciones del BID. Agradecimientos a Álvaro Ramoneda.
Dentro de las ciudades Latinoamericanas y el Caribe, uno de los lugares que tradicionalmente alberga importante movimiento y que muchas veces marca el pulso de la ciudad, son sus mercados. Sin embargo, muchos de ellos, a pesar de estar en los centros históricos, se encuentran desarticulados con el resto de la ciudad, debido probablemente al desorden que muchas veces marca la tónica del lugar, el centenar de vendedores informales que trabajan en el área, las malas condiciones de higiene y un entorno en el que puede primar la inseguridad y el deterioro.
En el marco de la Iniciativa de Ciudades Emergentes y Sostenibles (ICES) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y de Findeter trabajamos en la ciudad de Montería, Colombia. Mediante un proceso experimental de diseño urbano participativo experimentamos novedosas herramientas de diseño participativo, resultantes en una nueva metodología: ‘Laboratorio de Diseño Urbano’.
En Montería, el Mercado Central y su entorno fueron elegidos como área de intervención para rescatar el espacio público y remarcar la importancia que todo Centro Histórico tiene: su centralidad. El equipo multidisciplinario de arquitectos, urbanistas, trabajadores sociales y economistas del ‘Taller Urbano Bogotá-Viena’ liderado por el arquitecto colombiano Fernando Cortés Larreamendy y por el arquitecto austriaco Andreas Hofer de la Universidad de Tecnología de Viena, realizaron una serie de talleres urbanos que llamamos ‘Laboratorio de Diseño Urbano (LDU)’ con el fin de diseñar una estrategia urbana innovadora e integral mediante la participación ciudadana.
Conoce el proyecto en detalle a continuación.


















